A los 71 años, Sylvester Stallone está vivito y peleando. Una circunstancia está relacionada con otra. Porque el actor volverá a ponerse en la piel del gran personaje de su carrera, Rocky Balboa, para la secuela de Creed, el spin-off del Semental Italiano.

Pero Rocky enfrenta un cáncer (el diagnóstico había llegado en la primera película, que le valió una nominación al Oscar como Mejor Actor de Reparto). Y las imágenes de Stallone caracterizado con las secuelas de esa enfermedad habían disparado los rumores en septiembre de 2017, confundiendo ficción y realidad. Y estas horas fueron más allá: en las redes sociales lo dieron por muerto.

Tras pedir que se "ignorara esa estupidez", Sylvester hizo a un lado el enojo para tomarse el asunto con humor. "Mirando a mis hijas afuera, durante una tormenta de granizo -escribió en Instagram, con una filmación de Sophia Rose (21) y Sistine Rose (19) y -. ¡Es grandioso haber regresado de la muerte!".

Creed II estaría lista para este año. Y la película desbordará de nostalgia: marcará el regreso de Drago (Dolph Lundgren) el ex boxeador ruso que combate con nuestro héroe en Rocky IV. Drago entrena a su hijo (Florian Munteanu), quien buscará retar al hijo de Apollo Creed, Adonis Creed (Michael B. Jordan).

Y por supuesto, el filme promete ser un suceso de taquilla. Porque el éxito de Rocky sigue gozando de buena salud. Al igual que Sylvester.