Leonela Ayala pidió declarar este sábado por el asesinato de su sobrina Sheila. A un día de haber dado a luz y luego de que le quitaran la tenencia de sus cuatro hijos, le tomaron indagatoria en el hospital Malvinas Argentinas. Si bien no trascendió oficialmente el contenido de sus dichos, la mujer habría buscado despegarse de la muerte de la nena.

De acuerdo con las fuentes del caso que cita el periodista Mauro Szeta, la mujer de 25 años negó haber estado en el horario del asesinato. Aseguró que se fue 8 horas con sus hijos y que volvió por la noche.

Ahora “intentan demostrar qué pasó los días siguientes si el cuerpo siempre estuvo en su casa y nadie lo movió”, explicó el especialista y agrego que el fiscal Gustavo Carracedo “debe buscar testigos que corroboren que la mujer no estuvo en su casa al momento del crimen y que se marchó 8 horas con sus hijos”.

También declaró que durante las cuatro noches que pasaron hasta el hallazgo del cadáver de Sheila ella durmió en su casa junto a su marido y sus hijos, pero que no vio ni notó nada extraño.

De comprobarse su versión y que su marido le confesó lo que había hecho, tras lo cual ella decidió ocultarlo estaría bajo resguardo porque la ley no pena el encubrimiento entre cónyuges.

Este sábado debía declarar su pareja, Fabián González Rojas, quien está acusado de "homicidio doblemente agravado por alevosía y por tratarse de un femicidio". Pero se negó.

Por su parte, Ayala está acusada de "homicidio agravado por alevosía" en calidad de coautora.