Tras el accionar policial, algunos de los productos que iban a venderse terminaron sobre la vía pública. Una adulta mayor que iba con un rudimentario changuito de cartón levantó varias berenjenas. La imagen se volvió viral y causó indignación.

Efectivos de la Policía de la Ciudad no permitieron a un grupo de feriantes descargar camiones con verdura en Plaza Constitución para realizar el "feriazo" y tiraron gas pimienta y balas de goma contra los manifestantes.

Desde enero, se había prohibido que la UTT realice la protesta. Incluso un grupo de efectivos amenazó con llevarse los cajones de verdura.

En el forcejeo, al menos un cajón de berenjenas terminó desparramado en el piso. Una mujer de edad avanzada que había ido para buscar los alimentos que se iban a vender en señal de protesta, juntó algunas berenjenas.

La policía formada pasó al lado suyo casi sin mirarla. La imagen, que causó dolor, repudio e indignación en redes sociales, se viralizó.

Una pequeña agricultora de La Plata que fue a vender sus verduras al espacio público frente a la terminal de trenes lamentó el decomiso policial. "Le sacaron el pan de la boca a mis hijos", se quejó.

Un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) divulgado días atrás ponía números concreto al drama que viven día a día los pequeños productores rurales del tercer cinturón del conurbano.

La brecha de precios entre lo que paga el consumidor y lo que recibe el productor de frutas y verduras es en promedio de 4,44 veces. Sin embargo hay casos, como el de la manzana roja, en la que el sobreprecio llega al 884,20%.

Con un precio justo, quizás los productores no protestarían en espacios públicos. Con alimentos al alcance del bolsillo de los jubilados y pensionados, quizás una mujer no estaría juntándolos del piso.