Tras la última prueba del escrutinio provisorio hecha el sábado pasado, el apoderado del Partido Justicialista (PJ), Jorge Landau, denunció que "el software no fue auditado" y que no existe "seguridad de que no pueda ser hackeado".

"Es todo una gran improvisación, tenemos mucho temor de que esto pueda funcionar mal”, expresó y detalló: “Lo grave es que todo se busca hacer entre gallos y medianoche, nunca se nos consultó ni a nosotros ni a otra fuerza política ni ONG".

"El alcance del simulacro electoral del sábado fue limitadísimo", advirtió y agregó que en el PJ están "más preocupados que antes con lo que puede suceder en las elecciones".

"Los telegramas van a seguir publicándose en la web pero no van a tener el mismo contenido", puntualizó y explicó que "la imagen del telegrama que sale escaneado de la escuela no es la misma que se usa para contar los votos en el escrutinio provisorio".

En ese sentido, aseveró que el telegrama escaneado "es una elaboración de Smartmatic", la nueva empresa que en la última licitación desplazó a INDRA, la cual se venía encargado del escrutinio provisorio de todas las elecciones desde fines de la década del noventa.

"Lo que no quiero es que esa noche tengamos una versión equívoca de lo que sucedió en el cuarto oscuro", se explayó en diálogo con Radio Cítrica y recordó que "el apoderado de Roberto Lavagna" vio que "un telegrama que se mandó desde una escuela de Barracas nunca llegó".

Además confirmó que el PJ sigue adelante con "una presentación" ante la Justicia respecto del "cambio de la imagen que hace Smartmatic", a fin de que "no se utilice este sistema".

Al respecto, cuestionó que desde el Gobierno le dijeron que eso "era para tener más celeridad y tecnología al proceso electoral", lo cual calificó como una "incongruencia", ya que los primeros resultados oficiales "se van a conocer desde las 21, como siempre".

"El Gobierno tiene temor del resultado del domingo a la noche", argumentó sobre los motivos por los que el Gobierno insiste en el nuevo sistema y lo emparentó con el intento a último momento de dar de baja las PASO.

Por su parte, el fiscal federal con competencia electoral Jorge Di Lello también hizo algunas observaciones, aunque utilizó un tono más moderado: “No fue afortunado hacer un cambio sobre la marcha en el sistema de transmisión de datos". No obstante, dijo que "la primera gran tranquilidad que hay que plantear es que está vigente el traslado de datos desde el correo al Ministerio del Interior".

"Y queda el escrutinio definitorio de abrir las urnas que están cuestionados y contar los votos en los lugares que estén cuestionados", finalizó en declaraciones a Cítrica Radio.