"Fue Pablito". Una humorada, algo al pasar, según el propio padre de Pablo Ventura, fue el detonante para la detención de su hijo, que finalmente fue liberado este martes por la noche luego de comprobarse que ni siquiera estaba en Villa Gesell la noche en la que Fernando Báez Sosa fue asesinado a golpes por un grupo de 10 jóvenes.

"Los chicos al momento que los allanan no estaban sabiendo que habían asesinado a una persona, entonces tiraron el nombre de Pablo Ventura como haciendo un chiste. Estoy seguro que pasó así", aseguró José María Ventura en diálogo exclusivo con C5N.

"Después me vengo a enterar que cada pavada que hacían lo tomaban como una joda y decían 'fue Pablo Ventura'. Era un latiguillo que tenían", agregó el hombre.

Ventura, de 21 años, había sido detenido en Zárate, provincia de Buenos Aires, y trasladado a la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Villa Gesell, donde estuvo hasta este martes por la noche.

El muchacho había sido señalado por algunos de los 10 rugbiers que participaron del ataque a Báez Sosa como responsable de haber asesinado a Fernando Báez Sosa en la madrugada del sábado pasado.

Pero el muchacho le presentó a la fiscalía una coartada detallada sobre cómo había salido a comer con su familia en Zárate y luego había compartido tiempo con otro grupo de amigos en la misma localidad.

El video de la familia Ventura en un restaurante de Zárate aún no fue incorporado a la causa, pero el muchacho ya declaró frente a la fiscal Verónica Zamboni antes de ser liberado.