El problema generado por la llegada de personas provenientes del conurbano bonaerense y de zonas donde la circulación ha sido restringida configura la preocupación de las autoridades locales.

La recurrente llegada en los últimos días de personas que, sin autorización alguna, han intentado entrar a Junín despertó el alerta y, mediante la firma de un acuerdo con taxistas y remiseros, se han tratado de limitar los riesgos de que ese incumplimiento vuelva a registrarse.

Recientemente, miembros de la Secretaría de Seguridad del Gobierno local han mantenido reuniones para considerar el tema con los propietarios de autos de alquiler.

Mario Olmedo, Subsecretario de Control Ciudadano de la Municipalidad de Junín admitió que la situación se ha ido agravando. Tuvo su epicentro esta semana cuando una mujer, a bordo de un automóvil de alquiler, fue detectada en los puestos de control cuando quería acceder al ejido urbano local.

Olmedo señaló que en las reuniones se les informó a taxistas y remiseros los riesgos que conlleva el traslado de pasajeros desde esa zona hacia nuestra ciudad.

“Admitimos la buena predisposición de quienes estuvieron en la reunión, atendiendo a la difícil situación por la que atraviesan con la caída del trabajo, pero estuvieron de acuerdo en limitar los viajes al área metropolitana por un lapso de quince días” como aporte para ayudar a alejar posibles consecuencias negativas para la comunidad toda.

“Debemos resaltar el grado de compromiso que asumieron hacia la ciudad y, también hacia sus propias familias”.

El funcionario destacó que se desconoce cuánto tiempo puede extenderse esta situación, por lo que hay que extremar los recaudos para no acrecentar el peligro ya existente.

Reducción de siniestros viales

La menor cantidad de vehículos que circulan por la ciudad ha aparejado que disminuyan los choques y accidentes.

“Estamos en un cincuenta por ciento” en el numero si se realiza un análisis comparativo de las cifras entre antes de marzo y el último mes, en Junín, afirmó Olmedo.

De esos, entre 50 y 60 casos mensuales (siempre hablando de hechos donde hay lesionados) “muchas son caídas de moto”.

Resaltó que se venía haciendo un trabajo de concientización que se ha interrumpido por la pandemia, pero “hacemos un llamado a quienes transitan –principalmente a bordo de motos- a respetar los semáforos y las señales de tránsito”, como forma de aminorar los riesgos en el tránsito.

“Por eso, luego seguiremos trabajando para que el uso del casco sea generalizado” como modo de que haya menos consecuencias en los accidentes habituales en las calles de la ciudad.