En las últimas horas se viralizó el video de Ezequiel Massón, un músico oriundo de Bahía Blanca, que gracias al IFE comenzó su emprendimiento de pastas caseras, y le agradeció al presidente Alberto Fernández quien le contestó el emotivo mensaje. Este domingo el emprendedor dialogó con C5N y contó un poco más de su historia.

El nuevo emprendedor, que actualmente vive en Florencia Varela porque su mujer es de ahí, se dedicaba a vender equipamiento médico pero hace un año se quedó sin trabajo y la pandemia empeoró la situación. Ante esto, decidió acceder al Ingreso Familiar de Emergencia y comenzar a hacer pastas caseras para vender en el barrio.

"Yo saco cuentas y con una muzzarella y 5 kilos de harina se pueden hacer 30 pizzas y ya se triplica lo que el Presidente nos dio. Estoy feliz y le agradezco al señor Presidente, me cambio la vida", dijo Ezequiel.

Con respecto a cómo llegó a esta situación contó que: "Hace un año que estoy sin trabajo. Estoy buscando una empresa que se dedique a lo que hice siempre, hace 12 años que vendo equipamiento médico y trabaje para empresas del sur del país".

"Aprendí a cocinar desde chico. Venimos del campo de 17 de Agosto un pueblo muy chico de la provincia de Buenos Aires cerca de La Pampa", expresó Ezequiel sobre sus inicios en la cocina que pasó de ser un hobby a su fuente laboral, y afirmó: "Tuve que pedir disculpas porque no voy a llegar con todos los pedidos".

Al ser consultado sobre lo que prepara para vender manifestó: "Hago sorrentinos, tallarines, matambre a la pizza, lasagna. Están pidiendo muchos sorrentinos y la lasagna está haciendo punta".

"Yo soy de Bahía Blanca, pero vivo en Florencia Varela que es más difícil. Fue toda una estrategia vía redes sociales, en los grupos del barrio. Estoy sorprendido porque al segundo día el 50% no eran conocidos, la gente ve en las fotos de los productos frescos. En las redes estoy como pastas artesanales 'El Rey'", sostuvo.

Con respecto al precio que maneja para sus productos explicó que son económicos: "Si gasto 100 pesos para hacerlo, lo cobro 200 pesos. El kilo de tallarines está entre 130 y 150 pesos, pero cómo trabajo a mano me canso. Mi mujer me ayuda con los envíos y las notas".

Sobre su futuro post pandemia aseguró que: "Se hacer varias cosas, pero principalmente me dedico a vender equipamiento médico. Lo de la pasta puede funcionar y lo tengo en mente".