El municipio encabezado por Guillermo Britos decidió levantar los controles en los accesos al distrito a partir del lunes 19 de octubre. Lo que parece una flexibilización en la vigilancia sanitaria, en realidad, busca evitar que los vecinos se trasladen a zonas de circulación comunitaria y puedan “desparramar” el virus cuando regresan.

“El lunes levantamos los controles porque el conurbano, Capital y La Plata lo hicieron entonces está ocurriendo que los familiares se van de acá para allá, donde hay circulación comunitaria, no avisan y cuando vuelven te hacen un desastre”, explicó Britos.

Esta semana el intendente había adelantado la posibilidad de la flexibilización en los controles pero pidió una “mayor responsabilidad a los vecinos”. Su distrito está en fase 4 con 222 casos activos, 869 recuperados y 33 fallecidos.

Un control distinto:

Toda el área metropolitana bonaerense (AMBA) es zona de circulación viral. Lo que se intenta con esa medida “aperturista” es poder controlar aquello que fuera del municipio no se puede hacer.

“Es preferible que vengan los familiares acá para hacer un control distinto. Los podes obligar a que no salgan de la casa mientras están de visita y si no cumplen el protocolo pueden contagiar solo a la familia pero el que va a Buenos Aires hace un desastre cuando vuelve”, enfatizó Britos.