El próximo viernes vence la vigencia del decreto presidencial que definió las restricciones vigentes para intentar mitigar el avance de la segunda ola de contagios de coronavirus Covid-19 y se prevé que el presidente Alberto Fernández lo prorrogue sin cambios.

Así cada distritos deberá adecuar las restricciones vigentes en sus territorios siguiendo los criterios epidemiológicos previstos en el DNU. En este camino y merced del progresivo descenso de casos positivos que se viene registrando desde hace semanas, se prevé que la provincia de Buenos Aires mantenga el mismo esquema de restricciones vigente al día de hoy. Es decir no habilitará nuevas flexibilizaciones (en los municipios pertenecientes al Área Metropolitana de Buenos Aires) ni imponga mayores restricciones.

En tanto se prevé que la Ciudad de Buenos Aires avance con nuevas flexibilizaciones en algunos de los rubros más castigados por la pandemia: la gastronomía, los gimnasios y los salones infantiles.

En ese sentido, según pudo saber minutouno.com de fuentes del gobierno porteño, la Ciudad habilitará nuevamente la posibilidad de que los locales gastronómicos atiendan clientes al interior de sus salones con un aforo máximo del 30%.

Lo mismo podrán hacer los gimnasios que estarán habilitados a recibir a sus socios también con un aforo máximo del 30%.

También se definió que vuelvan a abrir salones infantiles con un aforo máximo del 30%.

La gran incógnita que sigue y que las autoridades del gobierno que conduce Horacio Rodríguez Larreta están abocadas a resolver por estas horas es cómo seguirá el dictado de clases en el nivel secundario.

En la Ciudad se analiza la posibilidad de que finalmente los estudiantes secundarios retomen finalmente las clases presenciales y dejen el esquema bimodal que combina presencialidad con virtualidad vigente en el actualidad.

Por el momento no hay una definición clara en este punto y se espera que el propio Rodríguez Larreta la informe el próximo viernes una vez que se anuncie cómo siguen las restricciones. Sí ya se definió que no se modificarán las fechas de las vacaciones de invierno tal como se barajó en algún momento.

De acuerdo con los datos oficiales del ministerio de Salud porteño, en las últimas cuatro semanas se pasó de un promedio de 2.700 casos diarios a 1.200 en los últimos días. A pesar de este importante descenso las autoridades sanitarias porteñas siguen siendo cautos y llaman a mantener todos los cuidados.