Cuando vecinos de Quilmes Oeste comenzaron a sentir un fuerte olor a gas en el ambiente y ruidos no habituales en plena vía pública, lo primero que pensaron fue que estaban frente a un inconveniente técnico y serios riesgos para los habitantes de esa zona.

Puesto en conocimiento de las autoridades el problema, los primeros en llegar iban a ser Bomberos Voluntarios, que detectaron una pérdida en el medidor de una propiedad.

A medida que pasaban los minutos iban a constatar que alguien había intentado robar un caño de cobre, material muy buscado en el mercado negro, sin advertir que pertenecía a la red de gas natural.

Se procedió al cierre de la válvula principal para evitar que el intento de robo termine en una tragedia.

No hubo personas heridas ni tampoco intoxicados y tomaron intervención las autoridades que ahora trata de establecer si el hecho tiene relación con otros similares registrados en el conurbano bonaerense.