En una serie de allanamientos coordinados durante la madrugada, fuerzas de seguridad golpearon el corazón de una organización criminal dedicada al narcotráfico y, presuntamente, a robos planificados. Entre lo incautado, destacan dosis de cocaína y marihuana listas para la venta, junto a armas, municiones y objetos que coinciden con los utilizados en el violento secuestro extorsivo del empresario Patricio Roberts, ocurrido hace tres meses. Las pericias buscan determinar si los detenidos —cuyas identidades se mantienen en reserva— integraban el comando que actuó en aquel hecho.

El operativo, que movilizó a más de cien efectivos, reveló la sofisticación logística del grupo: vehículos blindados, sistemas de comunicación encriptados y un arsenal oculto en propiedades rurales. Según indicaron voces cercanas al caso, la pesquisa apunta a desentrañar una posible alianza entre narcos y delincuentes especializados en secuestros, una modalidad que preocupa a las autoridades. Mientras la Justicia analiza los nexos, el Ministerio de Seguridad calificó los resultados como "un golpe estratégico al crimen organizado".