En el transcurso de la jornada, la ciudad fue escenario de dos siniestros de tránsito que, por fortuna, no dejaron saldos que lamentar más allá de los daños en los vehículos implicados.

El primer incidente ocurrió en la intersección de Nihuil y el Rector A. Rodríguez. Allí, por causas que se intentan establecer, colisionaron una utilitaria Fiat Fiorino, con dominio FZH 840, y una motocicleta Honda Wave de 110 cc, patente 422 JCR. Tras el impacto, las partes evaluaron la situación y, al no haber heridos de consideración, decidieron no labrar actuaciones policiales y limitarse al intercambio de la documentación correspondiente para los trámites de seguro.

Horas más tarde, se produjo un segundo evento de similar características. El escenario fue la calle Alsina, a pocos metros de su cruce con Fuse. La mecánica del accidente fue un simple roce entre un Peugeot, manejado por un hombre de 30 años, y un Volkswagen, dominio DUF 764, conducido por una mujer de 29. A diferencia del primero, este leve choque sí dejó secuelas en la estructura de ambos rodados. Al igual que en el caso anterior, no fue necesario asistencia médica y los conductores procedieron de manera formal, intercambiando los datos necesarios para dar curso a los reclamos ante sus aseguradoras.

Los hechos sirven como un recordatorio de la importancia de la prudencia al volante y de contar con toda la documentación del vehículo en regla para agilizar la resolución de estos imprevistos que, si bien en esta ocasión fueron menores, podrían tener desenlaces menos afortunados