Con una maniobra digna de película, un equipo de efectivos policiales ingresó a la “1-11-14” en el marco de una serie de allanamientos dispuestos por la justicia.
Camuflados en un camión de mudanza, tomaron por sorpresa a los narcos y encontraron droga escondida en ladrillos.
Secuestraron más de 2.000 dosis de cocaína y pasta base.
Los efectivos de la Ciudad simularon que iban a hacer un flete y desbarataron al tristemente conocido “Clan Villalba”, la banda que sucedió a “Los Marola”.
En seis allanamientos simultáneos, detuvieron a seis sospechosos, entre ellos su cabecilla y cuatro mujeres.
Se habían adueñado de la calle 10 tras el desmembramiento de la organización familiar compuesta por un matrimonio y sus cinco hijos que se filmaban y fotografiaban armados y disparando al aire.
Los estupefacientes incautados están valuados en 16 millones de pesos.
También hallaron marihuana, municiones calibre 9 milímetros y celulares.