La diputada macrista, Hebe Casado, que el año pasado ya se había burlado de los desaparecidos en la dictadura cívico militar, y que recientemente deseó que Cristina Kirchner se contagie de coronavirus, este martes volvió a comparar a los muertos por coronavirus con las víctimas del terrorismo de estado.

"3 veces 30.000", escribió en su cuenta de Twitter en relación a que este martes se alcanzaron los 90 mil muertos por coronavirus en Argentina.

El año pasado, la diputada provincial de Juntos por el Cambio de Mendoza había manifestado en la misma red social: "Son 30.000, no como los otros 30.000. Un éxito la estrategia del gobierno de científicos, pero como no reconocen errores, en 15 días dicen que seguimos sin derechos a la libre circulación ni a la educación ni a la salud".

Ante las críticas, borró el bochornoso mensaje y debió pedir disculpas públicas: "Soy una persona con firmes convicciones democráticas, pido disculpas públicamente por las expresiones vertidas en mi cuenta de Twitter. Fue una expresión inapropiada y fuera de lugar".

Pero la diputada Casado hace pocos meses volvió a estar en el centro de la escena cuando se confirmó que el presidente Alberto Fernández se había contagiado de coronavirus, en esa ocasión expresó su deseo para que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner también haya contraído el virus.

“Díganme que estuvo con CFK en las últimas 48 hs con el vacunado”, lanzó la legisladora mendocina en su cuenta de Twitter junto a un emoji de ruego.

A diferencia del exabrupto anterior, en esta oportunidad decidió no pedir disculpas y redobló la apuesta: "Pretenden que tenga compasión por personas que se saltaron la fila y le manotearon la vacuna a personas de riesgo. Escandalícense por eso. Escandalícense por no haber conseguido vacunas. Escandalícense por haber dejado 6 de cada 10 niños pobres. Escandalícense por los hechos".

En cuanto a su actividad como legisladora, en el 2020 Hebe Casado había presentado un proyecto en la Legislatura de Mendoza para que en la provincia se dejara de utilizar el tapabocas de manera obligatoria. La intención era que lo usen solo las personas consideradas en riesgo. Finalmente, la iniciativa no prosperó.