Fútbol

El silbato transparente: El VAR habla en vivo y la conmebol escribe una nueva página en la historia del arbitraje

Martes, 16 de Septiembre del 2025 - 15:15 hs.

La era de la expectativa muda, de las manos en la cabeza y de la furia ante una revisión incomprensible desde las gradas o el living de casa llega a su fin. El protocolo, probado con éxito en la Recopa del año pasado, ya no es una prueba. Es la norma. Cada vez que el árbitro principal se acerque a la pantalla, su posterior veredicto vendrá con una explicación audible. Mediante un micrófono adaptado, detallará la naturaleza de la revisión y el motivo concreto de la decisión final. ¿Fue fuera de juego? ¿Contacto mínimo en el área? ¿Manzo involuntaria? La voz de la autoridad arbitral pondrá fin a la especulación instantánea.

El objetivo declarado es triple: transparencia, claridad y confianza. Ya no bastará con que el juez señale el centro del campo o el punto penal. Ahora deberá fundamentar su fallo, acercando el complejo entramado del reglamento a un público que anhela entender el porqué de cada polémica. Se busca enterrar la desconfianza crónica hacia el VAR y, de paso, educar la mirada de millones de aficionados.

Este salto cualitativo no es una ocurrencia. Lleva el aval formal de la IFAB y la FIFA, los máximos organismos reguladores del fútbol mundial, y es la punta de lanza de un proceso de modernización que la Conmebol impulsa a toda máquina. Detrás hay un riguroso trabajo de capacitación para los equipos arbitrales, acostumbrados a deliberar en privado, y una inversión en tecnología para que el mensaje se transmita nítidamente en el estadio y por televisión.

El estreno mundial en el ámbito continental tendrá sabor argentino. Será este martes, desde las 19, en el estadio José Amalfitani, donde Vélez y Racing abrirán la llave de cuartos de la Libertadores. Horas antes, hoy desde las 21.30, Lanús y Fluminense en la Sudamericana serán los conejillos de indias de una medida que promete zanjar debates eternos... o, al menos, darles un marco de entendimiento nunca antes visto.

El silbato ya no será solo un sonido; será una voz. El fútbol sudamericano, tan apasionado y visceral, se sube a una ola de transparencia que promete calmar aguas turbulentas. El éxito de la misión no se mide en aciertos arbitrales—que también—, sino en la capacidad de que esa voz, clara y firme, logre lo imposible: ser escuchada y aceptada por todos. El partido acaba de comenzar