El desafío perfecto

Jueves, 09 de Octubre del 2025 - 13:20 hs.

La maquinaria argentina funcionó a pleno. Con una contundencia que no admite réplicas, la Selección Sub 20 barrió a Nigeria con un 4-0 que fue mucho más que un resultado. Fue un mensaje. Ahora, con el pasaje a cuartos de final firmemente sellado, el equipo de Diego Placente ya no piensa en el ruido de la goleada, sino en el silbato que iniciará un duelo de otro calibre: el próximo sábado, desde las 20:00 en el Estadio Nacional de Santiago, el rival se llama México.

En la previa, el técnico no se dejó llevar únicamente por el éxtasis del triunfo. Analítico, desmenuzó lo bueno y lo malo de una actuación que tuvo momentos de vértigo. "Estoy contento porque era un equipo difícil desde lo físico, a veces desordenado, pero en ese desorden te confunden. En un momento se nos complicó, pero pudimos saber sufrir", admitió Placente en conferencia, destacando el valor de los cambios para encontrar la tranquilidad que necesitaban. Uno de esos ingresos, Mateo Silvetti, fue el encargado de bajar la persiana con un golazo.

Pero la charla rápidamente viró hacia lo que se viene. Y el pronóstico es de máxima alerta. "Se viene un partido dificilísimo, lo veníamos viendo a México que juega bien. Somos dos selecciones que juegan y va a ser difícil como todos los cuartos de final", sentenció el DT, anticipando un choque de filosofías donde la pelota mandará.

La victoria, sin embargo, no llegó sin costo. La sombra de la lesión se cernió sobre el plantel con la fractura de clavícula de Álvaro Montoro. "Es una lástima porque estaba agarrando mucho más ritmo", lamentó Placente, quien además explicó el rompecabezas táctico que armó para potenciar a sus piezas ofensivas. La movilidad de Ian Subiabre por la derecha y la inteligencia de Maher Carrizo, autor de dos goles y una pieza clave por su versatilidad, fueron las claves para desarbolar a los nigerianos.

Con la ruta claramente marcada, la Albiceleste sabe que el verdadero Mundial comienza ahora. México espera en un escenario de alta tensión, con un lugar en semifinales en juego, donde aguarda el ganador del duelo entre España y Colombia. La goleada fue un paso necesario, pero el desafío perfecto está por llegar